martes, 5 de abril de 2011

GUARDIANES ASESINADOS POR SUS PROPIOS COMPAÑEROS


La Policía determina banda de guardianes opera en el Este
  • Investigación. El Departamento de Crímenes y Delitos de la Policía investiga a varias personas en torno a esos hechos.
Manuel A. Vega
La Romana
La Dirección Regional Este de la Policía Nacional determinó que los robos de escopetas y muertes de vigilantes privados ocurridas en los últimos días fueron cometidos por sus propios compañeros, tras constituir una supuesta banda de malhechores.
El general Víctor Hernández Vásquez, jefe de la Dirección Regional Este de la Policía Nacional, dijo que logró establecer que los robos de escopetas y muertes de guardianes privados que se habían cometido en esta ciudad y en el Este fueron acciones realizadas por sus propios compañeros de seguridad.
Sin embargo, el oficial no reveló los nombres de varios detenidos ni tampoco las compañías que dan servicios a empresas de La Romana, Higüey, Hato Mayor, San Pedro de Macorís, El Seibo y la zona turística de Higüey y Juan Dolio. De acuerdo a fuentes, los propios compañeros mataban y robaban las armas para poder cometer fechorías.
Al menos siete vigilantes han sido asesinados a quemarropa por presuntos compañeros de armas que según la Policía operan una banda en el Este del país. Los crímenes que afectan a vigilantes en esta región han obligado a que muchos guardianes renuncien a los puestos de trabajo por temor a ser asesinados.
Cada uno de los casos en los que se involucra a un vigilante asaltado y muerto, está siendo investigado por un equipo de Crímenes y Delitos de la Policía, bajo el mando del general Hernández Vásquez. La supuesta banda de vigilantes que atraca, roba y mata a sus compañeros habría llegado a ejecutar hasta dos guardianes por noche para hacerse del arma, para luego venderla a personas no identificadas.
Entre los guardianes muertos a manos de la banda se cita a Santo Astacio (Nelsito), en el muelle de San Pedro de Macorís. También en San Pedro de Macorís desconocidos mataron de varios disparos al vigilante de una envasadora de gas, Julio Santana (Héctor).
El caso más sonado fue el de dos vigilantes asesinados a tiros en la carretera La Romana-San Pedro de Macorís. Las víctimas son Pedro del Rosario, de 35 años, y Santos Báez, de 67. Lo extraño de todo es que estos casos solo se investigan, pero no hay nadie apresado para responder por las muertes.

1 comentario:

  1. en este pais existe un organo regulador para estas empresas de seguridad privada, el cual no sabemos que hace realmente pero lo ultimo que hace es regular estas empresas, porque en realidad no se cumple con los requisitos para que estas operen como deben hacerlo, primero emplean personas en edades no aptas para estos servicios, no depuran sus empleados y tienen sueldos pauperrimos, si corrigieran estas y otras anomalias cosas como estas no sucedieran.

    ResponderEliminar